Placer Culpable

Ene 29, 2021

El primer largometraje de la historia

Aunque como regla general, la historia de cine ha sido registrada de manera bastante meticulosa, todavía quedan ciertos temas que generan debate en algunos círculos de los amantes del séptimo arte. Uno de estos es cuál fue verdaderamente el primer largometraje en estrenarse.

Para fijar un parámetro, el primer estreno ‘comercial’ se dio en 1895 cuando los hermanos Auguste y Louis Lumière presentaron públicamente 10 de sus cortometrajes en Paris. A pesar de que hubo otros intentos de proyecciones anteriores, fue la obra de los Lumière la que realmente marcó un hito, además de darle el puntapié inicial a la industria en sí.

Ahora, si bien lo hecho en París a fines del siglo XIX fue toda una hazaña, por esa época la cinta promedio duraba menos de un minuto y generalmente era una secuencia de paisajes o personas anónimas realizando sus actividades rutinarias. Pero con el avance de los años, el cine se tuvo que adaptar, asumiendo el concepto de contar una historia y con eso también extendiendo su duración, lo que como efecto colateral nos dejó dos títulos que actualmente (y dependiendo a quien se le pregunte) son consideradas como los primeros largometrajes de la historia.

Lubin’s Passion Play

En primer lugar está la entrega estadounidense, producida por Lubin Manufacturing Company, empresa con base en Filadelfia. Su gran salto a la fama ocurrió en enero de 1903 cuando estrenaron “Lubin’s Passion Play”, su propia representación de la “Pasión”. Si bien tenía una duración de poco más de 60 minutos, lo que actualmente sería considerado un mediometraje, para la época era un tiempo muy prolongado por lo que se consideraba un largometraje.

Ahora ¿Por qué está en duda su título como el primer largo? Bueno, la respuesta es simple: es porque la película estaba dividía en treinta y un partes, cuya unión entregaba la totalidad de la historia por lo que para muchos no es considerada como un largometraje.

Story Of The Kelly Gang

El segundo contendor por el título de primer largometraje de la historia es la entrega australiana, que seguía el relato del famoso forajido de aquella nación, Ned Kelly. Esta cinta se estrenó el 26 de diciembre de 1906, apenas 25 años después de que Kelly muriera en la horca, pero más relevante aún, tres años después del estreno de “Lubin’s Passion Play”.

Para quienes se preguntan por qué esta sería es considerada el primer largometraje, cuando se estrenó años después del otro título, se debe a que a diferencia de su antecesor, no se dividió en partes, habiendo más de 1200 metros de cinta, los que componen los más de 60 minutos de la película. De hecho, según ‘Memoria del Mundo’ de la UNESCO, “Story Of The Kelly Gang” es indicado como el primer largometraje de la historia, por lo menos de manera oficial, por tanto esta discusión se daría por cerrada.

La Baraja De La Muerte 

Tuvieron que pasar 10 años para que Chile se inscribiera con su propio largometraje, el que llegaría en 1916 de la mano del director italiano Salvador Giambastiani y del guionista Claudio de Alas.

Esta cinta, también conocida como “El Enigma De La Calle Del Lord”, estaba basada en un crimen real cometido en la ciudad de Santiago y, debido a que cuando llegó la fecha de su estreno el juicio aún no había finalizado, la Municipalidad de dicha ciudad decidió prohibir la película, por lo que Giambastiani tomó la decisión de exhibirla por primera vez en Valparaíso.

Mientras que la historia más reciente del cine ha sido registrada de manera muy ordenada y detallada, la información referente a los primeros días de esta industria es bastante más difusa. Hay un sinnúmero de hechos que simplemente han quedado en el olvido, por lo que siempre hay que estar atento a hallazgos que nos pueden entregar nuevos detalles acerca de producciones que quizás algún día nos pueda dar pistas acerca de largometrajes que anteceden “Lubin’s Passion Play” o “Story Of The Kelly Gang” o por lo menos cerrar la discusión sobre cuál de los dos fue realmente el primero.

Damien Cox

Amante del cine y la televisión, fanático de los videojuegos, pero ante todo muy a favor de cualquier actividad que me permite pasar el día sentado en el sofá.

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