Aunque para las nuevas generaciones, la primera entrega de “Scream”, cinta en la que se nos presentó el o los (según como se quiera mirar) personajes de Ghostface, no parece más una cinta clásica como muchas otras. Todos los que disfrutamos del cine de terror, sabemos la verdadera importancia que tuvo esta película, la que le entregó una nueva vida al género, en una época en que no teníamos grandes estrenos de este estilo.
Ahora, y luego de un puñado de secuelas de calidad variada, nos llega la quinta entrega dentro de la franquicia, la que sin eliminar ni despreciar el pasado de la narración, busca darle nueva vida sumando una nueva generación de personajes a los tres sobrevivientes que los espectadores ya conocemos.
Veinticinco años después de que una racha de asesinatos brutales conmocionara a la tranquila ciudad de Woodsboro, un nuevo asesino se ha puesto la máscara de Ghostface y comienza a apuntar a un grupo de adolescentes para resucitar secretos del pasado mortal de la ciudad. Esto pondrá en peligro a todos los que de una forma u otra tienen relación con los asesinatos realizados por Billy Loomis y Stu Macher, incluyendo Sidney Prescott, Dewey Riley y Gale Weathers.
REGLAS DE SUPERVIVENCIA
Como ha sido la tónica de esta saga durante prácticamente su totalidad, la cinta rápidamente se embarca dentro de lo que es la mitología y las normas del cine de terror, jugando con conceptos que se han hecho inevitables en las películas de miedo, como no bajar solo al sótano o nunca decir ‘vuelvo enseguida’.
Pero la nueva generación de personajes en la película, tal como lo hizo originalmente Stu Macher, nos entregan un resumen del reglamento modernizado y adecuado para las audiencias actuales, dejando en claro que mucho ha cambiado, pero que ciertas cosas se mantienen iguales, de esta manera haciendo un guiño ideal a lo que fue la trama de la cinta de 1996.
UN MIEDO EFECTIVO PERO SIMPLE
Otro aspecto al que se hace mención en esta entrega, es el del terror más profundo con conciencia social, algo que vemos bastante en las películas de Jordan Peele, por dar un ejemplo, y el contraste que este estilo de miedo tiene que ver con lo que nos tiene acostumbrados “Scream”.
Para fortuna de todos aquellos que disfrutaron de los films anteriores de la saga, esta película mantiene su formato de ser una mezcla entre el subgénero del slasher, ofreciéndonos una cantidad no menor de sangre, y el misterio de querer descubrir quién es el asesino.
Esto también implica que todas las artimañas típicas de este tipo de terror, como la música que anticipa la llegada del asesino, o las tomas excesivamente cerradas para luego sorprender al espectador con su repentina y violenta aparición estarán presentes. Pero estos no son utilizados de manera inocente ni en vano, ya que el director está consciente de lo básico que resultan para el espectador actual, por lo que incluso juega y hace bromas con estos trucos.
SANGRE NUEVA Y VIEJOS CONOCIDOS
La trama está compuesta en su gran mayoría por personajes nuevos, comenzando con un puñado de adolescentes, entre los cuales destacan Tara Carpenter, (Jenna Ortega; “You”), la primera en encontrarse de frente con Ghostface, Dylan Minnette (Wes Hicks; “13 Reasons Why”) y Amber Freeman (Mikey Madison; “Monster”); a lo que se suma Sam Carpenter (Melissa Barrera; “In the Heights”), la hermana mayor de Tara, y Richie Kirsch (Jack Quaid; “The Boys”) novio de esta última.
Sin embargo, también tendremos la oportunidad de reencontrarnos con viejos conocidos de la saga como Dewey Riley (David Arquette; “Never Been Kissed”), Gale Riley (Courtney Cox; “Friends”) y Sidney Prescott (Neve Campbell; “Three to Tango”), el personaje que comenzó todo, además de la aparición inesperada de alguien de la primera entrega que no mencionaremos para evitar spoilers.
UNA ENTRETENIDA EXPERIENCIA CINEMATOGRÁFICA
Seguramente uno de los peores pecados que puede cometer una película es aparentar ser algo que no es, intentar ser un drama cuando la historia es tan ridícula que a todas luces es una comedia, como le pasó a Tommy Wiseau con su fiasco de culto “The Room”. Y en ese aspecto, la nueva entrega de “Scream” sabe exactamente lo que su audiencia quiere, una película que no teme burlarse de sí mismo y de su género que, entre litros y litros de sangre falsa, y uno que otro susto, nos ofrece una experiencia cinematográfica bastante divertida, pero que en ningún momento entra a competir con otras entregas de terror más serios, como “Babadook”, “Us” e incluso “A Quiet Place”.
*Lamentablemente la cinta en Chile quedó para Mayores de 18 años.
Título Original: Scream
Director: Matt Bettinelli-Olpin, Tyler Gillett
País: Estados Unidos
Año: 2022
Género: Horror, Misterio, Thriller
Duración: 1 hora 54 minutos
Con: Neve Campbell, Courteney Cox, David Arquette, Marley Shelton, Melissa Barrera, Jenna Ortega, Dylan Minnette, Jack Quaid, Jasmin Savoy Brown, Mikey Madison
Guión: James Vanderbilt, Guy Busick, basado en los personajes de Kevin Williamson
Música: Brian Tyler
Producción: Paul Neinstein, William Sherak, James Vanderbilt
Fecha de estreno: 13 de enero, 2022
Web: Instagram
Distribuidora: Andes Films Chile
