El 1 de febrero llega a las salas de cine de Chile, “Anatomía de una Caída” de la directora Justine Triet, quien se graduó de la Ecole Nationale Superieure des Beaux-Arts de París. Sus primeras películas cuestionan el lugar que ocupan los individuos en un grupo. Y ahora nos trae una película que representara el deterioro de la relación de una pareja.
Ahora conoceremos a Sandra (Sandra Hüller), Samuel (Swann Arlaud) y su hijo de once años Daniel (Milo Machado Grane), todos viven desde hace un año lejos de la civilización, en las montañas. Un día Samuel aparece muerto al pie de su casa. Se inicia una investigación sobre la sospechosa muerte.
Los investigadores parecen querer llevar ellos mismos el caso a un final rápido: la fiscalía presenta cargos contra ella. La propia Sandra sigue luchando con la muerte de su marido: ¿se suicidó o fue realmente – como sospechan los investigadores- un asesinato?. Pasa un año antes de que el juicio arranque a los tribunales. Entonces, Daniel también es llamado al estrado. La relación entre madre e hijo se pone entonces a prueba; sobre todo por el fiscal, que empieza a escudriñar brutalmente a los dos con sus preguntas.
La directora
Con películas como “Sur Place” (2007) que se filmó durante manifestaciones de estudiantes y “Solférino” (2008) durante las elecciones presidenciales. En 2009, dirigió “Des Ombres dans la Maison” en un distrito de San Pablo.
Su primer cortometraje, Vilaine Fille, Mauvais Garçon (Two Ships), ganó numerosos premios en festivales franceses e internacionales (European Film Award, Berlinale 2012; Grand Prix, Angers First Look; Grand Prix, Belfort; fue preseleccionado para la categoría de mejor cortometraje de los Premios César 2013).
La película con la que debutó, La Bataille de Solférino (Age of Panic), fue seleccionada para el programa ACID en el Festival de Cannes 2013 y nominada en la categoría mejor primera película en el Festival de Cannes 2014.
Victoria, su segunda película, abrió la Semana de la Crítica en el Festival de Cannes 2016. Protagonizada por Virginie Efira, la película recibió cinco nominaciones a los Premios César, que incluyen las categorías de mejor película y mejor actriz.
Sibyl, su tercera película, fue seleccionada para competir por la Palma de Oro en el Festival de Cannes 2019. Anatomía de una caída es su cuarta película y se estrenó en la Selección Oficial en competencia del Festival de Cannes 2023.
¿Cuál fue el punto de inicio de Anatomía de una caída?
Mi intención era crear una película que representará el deterioro de la relación de una pareja. El concepto era retratar el deterioro físico y emocional de un cuerpo de manera técnica, como símbolo del deterioro de la historia de amor. Esta pareja tiene un hijo que descubre la tumultuosa relación de sus padres durante un juicio que indaga todos los aspectos de su pasado. A medida que se desarrolla el juicio, el niño pasa de un estado de confianza total en su madre a un estado de duda, lo cual marca un quiebre en su vida. La película sigue de cerca esta transformación. En mis películas anteriores, los niños estuvieron presentes, pero de manera silenciosa, simplemente aparecían en el contexto. Sin embargo, en esta película, quise incorporar el punto de vista del hijo a la narración y yuxtaponerlo con el de Sandra, el personaje principal, para equilibrar los hechos.
La película tomó la forma de un interrogatorio prolongado. Con escenas que van desde el hogar de la pareja hasta la sala de audiencias, donde los personajes son interrogados constantemente. Quise darle un sentido de realidad utilizando un estilo documental tanto en la narración como en la fotografía.
También quise ahondar en las complejidades de la historia y despertar diversas emociones en el público. Para lograr este objetivo, opté por mayor simplicidad: la ausencia de música adicional y un tono descarnado, sin adornos, que diferencia esta película de mis trabajos previos.
Ya va quedando poco para que el 1 de febrero llegue a los cines “Anatomía de una Caída”.
