Aunque ha sido juzgado, arrestado, privado de filmar y obligado a vivir en el exilio, Mohammad Rasoulof no deja de revelar al mundo, a través de sus películas, los conflictos sociales y políticos de su Irán natal. Tal como lo demuestra su último largometraje: “La Semilla del Fruto Sagrado”.
Donde por medio del drama y el suspenso se expone el complejo momento de una familia, que se vuelve el espejo de lo que se vive en el país que habitan. Donde muchos inocentes se convierten en blanco del accionar de los tribunales revolucionarios y su interpretación de la ley islámica.
Lo que Rasoulof expone a través de la ficción narrativa, pero teniendo como aliado esencial las imágenes reales obtenidas por celulares durante las protestas de 2022 y 2023. Las que surgieron en diferentes ciudades por la muerte de Mahsa Amini, tras ser arrestada por llevar mal puesto su velo.
La tensa calma de La Semilla del Fruto Sagrado
Una combinación de la imaginación fílmica y la crudeza de la realidad que la cinta de casi tres horas de duración, que recibió el Premio Especial del Jurado en Cannes y estuvo nominada al Oscar a Mejor Película Internacional, usa con meticulosidad al mostrar la estremecedora experiencia de una familia.
La que es encabezada por Iman (Missagh Zareh), un abogado que acaba de obtener un ascenso en el Tribunal Revolucionario de Teherán, asumiendo el cargo de juez de instrucción. El que en lo personal le permitirá tener una mayor remuneración y una mejor casa para él, su esposa e hijas.
Aunque no todo es tan positivo, ya que el nuevo puesto de investigador judicial no es tal y se remite solo a firmar sentencias -muchas veces de muerte- que ya fueron dictadas por un colega. Algo que lo angustia, pero asume con aplomo y el irrestricto apoyo de su mujer Najmeh (Soheila Golestani).
Las sospechas de Iman se transforman en paranoia
Así, Iman comienza a acostumbrarse a su nueva posición y a tener que portar un arma, ya que el peligro de ser atacado por oponentes a los tribunales está latente, mientras en su hogar continúa la rutina. Con Najmeh haciendo las labores de la casa y sus hijas retomando sus respectivos estudios.
Sin embargo, la universitaria Rezvan (Mahsa Rostami) y la adolescente Sana (Setareh Maleki) son conscientes de que la tranquilidad es lo que menos se respira en las calles. La realidad que confirman por medio de las noticias y los posteos en redes sociales que ven en sus celulares.
Una tensión y violencia que empeoran con el paso de los días, como lo atestigua directamente Rezvan, luego de que su amiga Sadaf (Niousha Akhshi) recibe un disparo de perdigones en su cara. Al tiempo que el arma de su padre desaparece y este comienza a desconfiar de su esposa e hijas.
Lo que lleva a un pasaje final de ritmo y tensión en aumento, donde las sospechas del protagonista lo empujan a la paranoia. En una denuncia del abuso de la autoridad a escala personal y nacional, que “La Semilla del Fruto Sagrado” concreta con crudeza y asertividad, y el destacado trabajo de su elenco.
- Título Original: Dāne-ye anjīr-e ma’ābed
- Director: Mohammad Rasoulof
- País: Alemania, Irán, Francia
- Año: 2024
- Género: Drama, Suspenso
- Duración: 2 horas 47 minutos
- Con: Soheila Golestani, Missagh Zareh, Mahsa Rostami, Setareh Maleki, Niousha Akhshi, Amineh Arani, Reza Akhlaghirad, Shiva Ordooie
- Guión: Mohammad Rasoulof
- Música: Karzan Mahmood
- Producción: Mohammad Rasoulof, Rozita Hendijanian, Amin Sadraei, Jean-Christophe Simon, Mani Tilgner
- Fecha de estreno: 6 de marzo de 2025
- Distribuidora: Cinetopia