Muchas veces el proyecto de una película toma un tiempo, pero en ocasiones la materialización de algunas puede durar meses, años e incluso décadas. Tal como le ocurrió a Francis Ford Coppola con “Megalópolis”, cuya génesis se ubica en la ya lejana década de los 70.
Cuando poco después de filmar “Apocalipsis Ahora”, una de las piezas fundamentales de su carrera, el cineasta concibió una idea que se alimentaba de su amor por el teatro con su conocimiento sobre historia romana. La que año tras año iba creciendo en idealismo y complejidad.
Con páginas y páginas de un guión, como describen los conocedores de la vida y obra de Coppola, que no vería la luz en un largo plazo. Un hecho en el que además jugó un papel fundamental que no pudiera conseguir el presupuesto para concretar su colosal visión fílmica.
La utópica apuesta de Megalópolis
Sin embargo, con tozudez y el sacrificio de su propio dinero, el responsable de “El Padrino” logró filmar la monumental cinta que llegó a salas locales. Esto tras debutar en el pasado festival de Cannes, dividiendo a la crítica con la singularidad de su apuesta narrativa y visual.
Donde la complejidad del relato, con la utopía dando paso a la distopía, se combina a una visualidad fantástica y compleja, por momentos un tanto desmedida. Además de un guión poco preciso, algo fomentado seguramente por el cúmulo de ideas que el director recopiló a través de los años.
El cual tiene como motor a Cesar Catilina (Adam Driver demostrando otra vez su talento), un acaudalado y visionario arquitecto, premiado con el Nobel por la invención del Megalon. Un innovador material con el que busca reconstruir la ciudad de Nueva Roma -una Nueva York alternativa- y convertirla en Megalópolis.
El gran detractor de la visión de Catilina
Una cruzada que Catilina -atrapado entre su creatividad, el duelo por su esposa, el alcohol y el don de parar el tiempo- quiere concretar a pesar de la férrea oposición de Franklyn Cicero (Giancarlo Esposito), el conservador alcalde de Nueva Roma que ve la utopía del arquitecto como un disparate.
En un antagonismo inspirado por la conspiración de Catilina -complot que propició el paso de la República Romana al Imperio en el año 63 a.C.-, al que rodean varias subtramas y personajes. Algunos de los cuales son desaprovechados, al igual que los actores de peso que los interpretan.
Figuras que en su mayoría simbolizan lo mejor y lo peor de la humanidad. Desde la comprensiva y también soñadora Julia (Nathalie Emmanuel), la hija del alcalde que se convierte en pareja de Catilina; hasta la ambiciosa ex amante de este último, Wow Platinum (Aubrey Plaza).
Sin olvidar al celoso Clodio Pulcher (Shia LaBeouf), primo del protagonista e hijo de Hamilton Crassus III (Jon Voight), el millonario banquero que organiza una espectacular boda al estilo del coliseo romano. En una de las escenas que ejemplifica la sobrecargada singularidad visual y conceptual de “Megalópolis”.
- Título Original: Megalopolis
- Director: Francis Ford Coppola
- País: Estados Unidos
- Año: 2024
- Género: Drama, Ciencia Ficción, Fantasía
- Duración: 2 horas 18 minutos
- Con: Adam Driver, Giancarlo Esposito, Nathalie Emmanuel, Aubrey Plaza, Shia LaBeouf, Jon Voight, Laurence Fishburne, Kathryn Hunter, Dustin Hoffman, Talia Shire, Jason Schwartzman, Grace VanderWaal, Chloe Fineman, James Remar, D. B. Sweeney
- Guión: Francis Ford Coppola
- Música: Osvaldo Golijov
- Producción: Barry Hirsch, Fred Roos, Michael Bederman, Francis Ford Coppola
- Fecha de estreno: 9 de enero de 2025
- Distribuidora: Cinecolor
