Abr 26, 2021

¡No te lleves mi Oscar!

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By @ @myianatos y @fpabloray

Los premios de la Academia no siempre están de acuerdo con el público, con los críticos, ni son en toda ocasión justos o visionarios con el cómo envejece una película o actuación. Por ejemplo, la mejor película de la historia, “El Ciudadano Kane” dirigida por Orson Welles, de 9 nominaciones sólo se llevó la estatuilla dorada por Mejor Guión Original.

Otro caso emblemático es el del maestro del suspense Alfred Hitchcock, cuyas películas recibieron varias nominaciones, pero sólo le dieron el llamado “Oscar honorífico” en 1967. O, un episodio más actual, en 2011, “El Artista” un filme realizado a lo cine mudo, olvidable, que ganó como Mejor Película por encima de historias como “Hugo”, “El Árbol de la Vida”, “Medianoche en Paris” o “Historias Cruzadas”, bastante mejor logradas e interesantes para el público.

En el caso de la actuación, como todo arte si bien es subjetivo, han habido muchas injusticias realmente escandalosas, aquí repasamos algunas.

thehustler

PAUL NEWMAN – THE HUSTLER

Uno de los grandes íconos de la historia del cine norteamericano, durante años se fue de la ceremonia de los Oscar con las manos vacías, ocho veces en total como actor y una más como director. Perdió por papeles ya considerados clásicos, como ‘La Leyenda del Indomable’ o ‘El Veredicto’, y aunque finalmente se llevó el premio en 1983 por interpretar al veterano jugador de pool Eddie Felson, en la cinta ‘El Color del Dinero’ de Martin Scorsese, se cree que eso fue más una compensación, por no haberlo recibido veinticinco años antes por su papel en ‘The Hustler’, la primera historia del triste buscavidas.

En 1961, el actor de los ojos azules ya contaba con varios registros importantes, había sido nominado tres años antes a Mejor Actor por su intenso retrato junto a Elizabeth Taylor en ‘El Gato sobre el tejado de zinc’, y había ganado como Mejor Actor en Cannes por su papel en el melodrama ‘El Largo y cálido verano’, ya era considerado una estrella, sin embargo, el papel que lo volvería mítico sería el de ‘The Hustler’. Newman hace una interpretación impresionante, lúcida e inolvidable, nunca antes sus ojos habían transmitido tanto dolor y su personaje de Eddie Felson se convertiría en un emblema del cine clásico estadounidense, sin embargo, ese año la Academia le dio la estatuilla al actor sueco vienés Maximilian Schell por su interpretación en la obra maestra de Stanley Kramer, ‘Los Juicios de Nuremberg’, una interpretación sin duda gloriosa, en una cinta mucho más grande, pero que no vibra con la misma intensidad que la de Newman, quien siempre lamentó su derrota en esta ocasión.

AL PACINO – THE GODFATHER 1, SERPICO Y THE GODFATHER 2

Al Pacino es otro actor que durante años fue ignorado injustamente por la Academia. En 1972, cuando aún era un actor desconocido, el histrión dio vida a Michael Corleone, el hijo menor del capo de la mafia Vito Corleone en la obra maestra de Coppola, ‘El Padrino’. Alcanzó el reconocimiento de la crítica, sin embargo, a pesar de aparecer mucho más tiempo en pantalla que su compañero, el veterano Marlon Brando, que irónicamente si fue nominado a Mejor Actor Principal, Pacino, por su parte, fue nominado a Mejor actor de Reparto. Como protesta, el italoamericano decidió no asistir a la ceremonia de la Academia, que además optó por darle el premio a un sumamente inferior Joel Grey en el musical de Bob Fosse, ‘Cabaret’.

Una mala decisión de parte de los votantes, que volvería a repetirse los dos años siguientes: En 1973, Pacino fue nominado por su impresionante rol como el policía Frank Serpico, en la grandiosa cinta de Sidney Lumet, un papel que con los años ha generado culto y un estilo visual, pero lamentablemente perdería ante Jack Lemmon, y en 1974, Pacino volvería a ser nominado por su papel de Michael Corleone, ahora en la secuela y por Actor Principal, sin embargo, nuevamente el premio se lo llevaría otra persona, Art Carney por su papel en la road movie ‘Harry y Tonto’, una actuación que puede ser buena, pero que solo es recordada por los más cinéfilos, en cambio el personaje de Michael Corleone ha traspasado las fronteras del tiempo, y sigue brillando como el primer día.

Décadas después, en 1993 Pacino por fin recibiría su primer Oscar, por su papel en la cinta ‘Perfume de Mujer’, una actuación que a pesar de ser memorable, no se encuentra dentro de sus mejores interpretaciones, y se siente más como un galardón honorífico. ‘Rompieron mi racha’ (de derrotas) diría el actor irónicamente antes de recibir su premio.

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GLENN CLOSE – FATAL ATRACTION

Glenn Close comenzó su carrera como actriz pasados los 30, pero de inmediato destacó por la fuerza que le impregnaba a sus roles. En 1987, su papel de Alex, una sensual y desequilibrada acosadora en “Atracción Fatal”, quien le hace la vida imposible a su aventura pasajera de nombre Dan (Michael Douglas), la pone en el tope de las actrices de esa época. Por supuesto, recibió una nominación al Oscar como Mejor Actriz, aunque este premio le fue arrebatado por la popular cantante Cher, la que si bien hace un buen rol en la comedia romántica “Hechizo de Luna”, su performance está muy lejos de la calidad de uno de los papeles más icónicos y potentes de la actriz de 74 años.

Close ostenta, además, la mayor cantidad de nominaciones a los premios de la Academia por sus actuaciones, sin recibir una sola estatuilla. En otras ocasiones le tocó competir con grandes actrices en grandes papeles, por lo que en esos casos es más discutible, por ejemplo, perdió contra Jodie Foster en “Acusados”, mientras ella iba por “Relaciones Peligrosas”, o cuando la estatuilla hace poco se la llevó Olivia Coleman por “La Favorita”, a pesar de la sublime actuación de Glenn en “La Esposa”.

Este año se encuentra nuevamente en el grupo de las mejores actrices secundarias y, curiosamente, también de las peores por su trabajo en “Hillbilly Elegy” dirigida por Ron Howard. ¿Será que ahora si gana el Oscar, aunque sea por compensación, como se ha hecho en otras ocasiones con algunos actores qué padecieron su misma racha? ¿Y se llevará también el Razzie?

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MERYL STREEP – ADAPTATION

Si hay una actriz reina en nominaciones, esa es Meryl Streep, reconocida por su versatilidad y talento, ha sido elegida entre las mejores en 21 ocasiones, pero increíblemente ha ganado sólo en 3 oportunidades; como actriz secundaria en “Kramer vs Kramer” y como actriz protagónica en la tremenda película “Sophie’s choice” y por su interpretación de Margaret Thatcher en “La dama de Hierro”.

Aunque ha perdido muchas más veces de las que ha ganado, y hay mucho público que piensa continuamente que esto no es justo, más aún cuando se piensa en Catherine Zeta-Jones “robándole” la estatuilla a Mejor Actriz Secundaria en 2003.

En esa premiación pocos daban crédito a que una actriz como la esposa de Michael Douglas ganaría por su rol en “Chicago”, donde despliega versatilidad cantando y bailando, pero de ahí a estar al nivel actoral de Streep en “El Ladrón de Orquídeas” (Adaptation) de Spike Jonze, donde interpreta a la autora de best sellers Susan Orlean…Creo que sólo los miembros de la Academia lo creen.

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MICKEY ROURKE – THE WRESTLER

Aunque no es fácil argumentar en contra de que Sean Penn ganara el Oscar por su interpretación en “Milk” el 2008, ese año había algo en el papel de Mickey Rourke en ‘The Wrestler’ que la hace especial y superior. El histrión, otrora estrella e ícono sexual de la década de los 80, había prácticamente desaparecido del panorama cinematográfico al haber volcado su atención al boxeo profesional a principios de los 90’s. Esto hizo que durante los años siguientes su actividad actoral se redujera significativamente a cameos olvidables o papeles secundarios, como en ‘Sin City’ el 2005, pero no sería hasta el 2008 que Rourke restableció por completo sus credenciales.

En ‘The Wrestler’, interpreta a Randy «The Ram» Robinson, un luchador profesional que, tras haber sido una estrella en la década de los ochenta, trata de continuar su carrera en el circuito independiente, combatiendo en cuadriláteros de tercera categoría. Cuando se da cuenta de que los brutales golpes que ha recibido a lo largo de su carrera le empiezan a pasar factura, decide poner un poco de orden en su vida. Con obvias similitudes reales a la vida de Rourke, el actor da una lección de humanidad con la interpretación dolorosa de un hombre tratando de encontrar el honor y la aceptación en un mundo que ya no le pertenece. 

Con momentos de verdadera ternura, principalmente centrados en él reavivando su relación con su hija, junto con auténtica acción y musculatura en el ring, The Wrestler es fascinante, sorprendente, desgarradora, y todo gracias a Mickey Rourke, quien ofrece la mejor actuación de su carrera.

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CHRISTIAN BALE – VICE

El actor galés Christian Bale es sin duda alguna uno de los mejores de su generación. Sin miedo a cambiar físicamente, ni de acento, una y otra vez ha demostrado su calidad histriónica sin siquiera recibir reconocimiento alguno en el premio más importante del cine, por papeles como Patrick Bateman en “Psicópata Americano” o Trevor Reznik en “El Maquinista”. Y si bien ganó el Oscar como Actor Secundario con “El Peleador” de David O. Russell, donde interpreta al hermano del protagonista, un exboxeador adicto al crack, en 3 ocasiones más ha sido seleccionado sin éxito, siendo la más reconocidamente injusta en 2019. Ese año ganó como Mejor Actor Rami Malek por interpretar a Freddy Mercury en “Bohemian Rapsody”. Un entretenido drama musical sobre la vida y obra del vocalista de Queen.

Malek, incuestionablemente hace una buena caracterización bajo algunas prótesis faciales y exagerados dientes postizos, pero Bale, debajo de sus propias prótesis y aumento de peso para interpretar a Dick Cheney en “Vice”, entrega una actuación llena de verdad y detalles, sin contar, por supuesto que la película de Adam McKay es mucho más sólida… Al Oscar le gustan las transformaciones físicas, los personajes reales, cualidades que ambos tenían, pero en este caso la popularidad pudo más.

Ejemplos hay muchos, en 1939, un año emblema para el cine, en el que estaba nominado Clark Gable por la épica ‘Lo que el viento se llevó’ y James Stewart por ‘Caballero sin Espada’ de Frank Capra, la estatuilla se la llevó Robert Donat, un actor que no volvió a ser nominado. O en 1950, Judy Holliday le arrebató el premio a Bette Davis y Anne Baxter por ‘Eva al Desnudo’, e incluso a Gloria Swanson por ‘El Crespúsculo de los Dioses’. La academia, sin duda, no siempre es objetiva, y sus decisiones muchas veces se dejan llevar por la política, el contexto, e incluso por la presión social. Sin embargo, los verdaderos jueces son los espectadores, quienes a lo largo de los años, elegirán a los reales ganadores.

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