Con mayor o menor acierto, las biografías de reconocidas figuras musicales siempre han inspirado muchas películas a lo largo de la historia del cine y sin ir muy lejos en los últimos años se han podido ver adaptaciones de la vida de cantantes tan distintos entre sí como Andrea Bocelli (La música del silencio, 2017), Freddie Mercury (Bohemian Rhapsody, 2018), Elton John (Rocketman, 2019) y David Bowie (Stardust, 2020). Las formas de acercarse a estas estrellas pueden ser muy diversas; lo más habitual son los biopics convencionales y predecibles cuando se trata de alguien ya fallecido, pero si aún sigue activo y vigente, los caminos pueden variar aún más: puede ser una fantasía musical como lo hizo Rocketman, o una ecléctica y creativa exploración como la que Todd Haynes realizó en torno a Bob Dylan en su I’m Not There, de 2007.
Una variante muy especial es la que emprende “La voz del amor”, que acaba de llegar a la cartelera y está libremente inspirada en la vida y carrera de la popular cantante canadiense Céline Dion. Tan «libremente inspirada» que, al no contar con el apoyo oficial de la artista, su nombre en el filme es Aline Dieu, aunque buena parte de lo que se cuenta en el guion es parte real de lo vivido por la intérprete y por supuesto aparecen algunas de sus canciones más recordadas, incluyendo su potente versión en vivo de «My Heart Will Go On» en los premios Oscar la noche de 1998 en que Titanic arrasó con las estatuillas.
Tono cómico, resultados atípicos
Lo que distingue a esta coproducción franco-canadiense es su tono: aunque el recorrido por la biografía de Aline sigue derroteros cronológicos habituales para desplegar una tradicional historia de esfuerzo y superación y, a pesar de los componentes dramáticos que aparecen -la historia de amor entre la cantante y su mánager varias décadas mayor, las complicaciones cuando pierde temporalmente la voz, las dificultades para lograr tener hijos-, curiosamente hay una permanente presencia de elementos de humor y a menudo sus toques cómicos la hacen parecer una parodia e incluso rozar la caricatura. Más de un crítico la ha definido como un cosplay de Céline Dion y la particular mezcla entre comedia romántica naif y kitsch con el drama familiar y los numerosos fragmentos musicales, hacen que el resultado sea muy atípico y, por lo mismo, genera y generará reacciones bastante mixtas entre la crítica y el público.
La forma en que se plantea esta propuesta se puede entender teniendo en cuenta quién está detrás: la actriz y realizadora Valérie Lemercier, quien debutó en cine hace tres décadas dirigida por el prestigioso Louis Malle en “Locuras de una primavera” (Milou en mai) y desde entonces ha actuado en cintas de otros importantes cineastas, desde Sydney Pollack a Claire Denis. Pero los cinco largometrajes previos que componen su trayectoria como directora, iniciada en 1997 con su ópera prima “Quadrille”, han sido todos comedias, en las que ella siempre actúa y además ha podido dirigir a figuras como Catherine Deneuve y André Dussollier.
El desafío de Lemercier
Actualmente de 58 años, Lemercier asumió un gran desafío con “La voz del amor”, ya que no sólo la dirige, coescribió el guion y es una de las productoras, sino además la protagoniza encarnando a Aline Dieu a lo largo de casi toda su vida, incluso cuando sólo tenía 12 años, lo que se logró gracias a un proceso digital, algo que ha generado diversas reacciones. Aunque la voz que oímos no es la de Dion ni la de Lemercier, sino la de la cantante francesa Victoria Sio, que logra un gran parecido con la canadiense, de todos modos, la actriz desarrolla un permanente despliegue en pantalla tanto durante los muchos números musicales como en sus momentos más personales. Y el esfuerzo ha sido recompensado: en este mismo 2022 en que se cumplen tres décadas de su primera nominación al César, premio que posteriormente ganaría en dos ocasiones -Mejor Actriz Secundaria en 1994 y 2007-, en febrero Lemercier ganó al fin el trofeo como Mejor Actriz por su rol en esta producción, que además recibió otras nueve nominaciones, incluyendo Mejor Película y Mejor Dirección. Culminaba así un recorrido de más de un año para la película porque, aunque tuvo sus dos primeras exhibiciones el 2020, su verdadero estreno fue el año pasado, incluyendo su exhibición en el Festival de Cannes.
Con su muy convincente interpretación de la protagonista, Lemercier encabeza un efectivo elenco donde no se puede dejar de destacar especialmente la simpatía y humanidad de esa madre que encarna Danielle Fichaud. Y como era de suponer, la música tiene un rol predominante, no sólo con los éxitos de Dion, sino además con otras composiciones, desde la canción homónima que motiva a la familia a nombrar Aline a su hija -el clásico de Christophe que ya se volvió a poner de moda el año pasado gracias al cover de Jarvis Cocker en La crónica francesa- y hits de hace más de medio siglo como «Mammy Blue», hasta emblemáticas interpretaciones de estrellas como Barbra Streisand y Elvis Presley, o el uso de la melancólica «Going to a Town» de Rufus Wainwright. Y otro clásico, «Nature Boy», será una especie de simbólico leitmotiv que aparecerá en distintos momentos durante el filme.
Con un atractivo y vistoso trabajo de ambientación de época, tanto en dirección de arte como en vestuario, maquillaje y peluquería, “La voz del amor” cumple con lo que se podría esperar de una película como esta. Es liviana y edulcorada, pero de todos modos encantadora, aunque es verdad que no profundiza demasiado. Es así como desde los humildes orígenes familiares de esa familia con 14 hijos, se van acumulando situaciones una tras otra y casi de manera rutinaria y esquemática. El conjunto se alarga mucho más de lo necesario, en especial con muchas escenas de shows en vivo que se parecen demasiado unas a otras. Pero definitivamente será un imperdible para fans de Dion y, aunque la familia de ésta no la ha aprobado, al menos se supone que su mánager dio el visto bueno. La propia Céline no se ha pronunciado al respecto, pero tampoco podría ofenderse mayormente, porque la película se mueve en terreno seguro, la trata bastante bien y todo tiene un prisma muy positivo, amable e inofensivo, acentuado por el uso de los recursos cómicos.
Título Original: Aline
Director: Valérie Lemercier
País: Francia, Canadá, Bélgica
Año: 2021
Género: Biografía, comedia, drama, música
Duración: 126 minutos
Con: Valérie Lemercier, Sylvain Marcel, Danielle Fichaud, Roc Lafortune, Antoine Vézina, Pascale Desrochers, Jean-Noël Brouté
Guión: Valérie Lemercier y Brigitte Buc
Producción: Sidonie Dumas, Alice Girard, Edouard Weil, Valérie Lemercier
Fecha de Estreno: 23 de junio, 2022
Distribuidora: Andes Films
