El baño, es uno de los lugares más húmedos de todo hogar, y esto se debe básicamente a la acumulación de vapor producto de duchas y la poca o nula ventilación existente en este lugar.
Una buena solución a este problema es incluir extractores de aire, cuya función principal es eliminar el exceso de humedad mediante la aspiración y renovación de aire en diferentes zonas de la casa como el baño, cocina o cuarto de lavado. Valentina Tudela, Ingeniera de Proyectos de Climatización de Jonas Ventilación, comenta que, “actualmente la construcción de viviendas garantiza una mejor calidad de aire al interior de estas, y es por ello que incluir un buen extractor de baño es parte fundamental de un sistema de ventilación. Complementar el ingreso de aire pasivo (por ventanas y puertas) con ventilaciones de muro, contribuirá a evitar la formación de agentes dañinos tales como la proliferación de hongos, aparición de moho, y también eliminar los malos olores”.
En la actualidad existen varios tipos, desde los extractores básicos que funcionan al pulsar el interruptor de la luz, evolucionando a modelos que se activan con sensores automáticos e incluyen características como sensores de humedad (higrostato), olor, luz y temperatura, así como también otros que funcionan con un timer para programar su uso en un lapso de tiempo determinado.
Entre los beneficios que podemos obtener al incorporar un extractor en nuestros baños, están:
Mantener la humedad bajo control: Este apartado puede considerarse el punto inicial al momento de decidir adquirir un extractor de aire, ya que ayuda directamente en la circulación del flujo de aire, de ahí el motivo por el cual sea necesario en baños, cocinas o salas de lavado, ya que mientras más alto se encuentre (e incluso si está en el techo) ayudará de mejor manera a extraer vapores y evitar la condensación en el lugar.
Cuida tus paredes y cortina de baño: Con la instalación de un extractor, la expulsión de vapor es mucho más rápida, gracias a su mecanismo de funcionamiento son capaces de mover el flujo de aire de un sector hacia otro (desde el interior hacia el exterior) evitando inmediatamente que las paredes y textiles como toallas o la cortina de baño atrapen el vapor que se está condensando, transformarse más tarde en hongos y moho.
Ventilación de malos olores: A nadie le gusta entrar a un baño que huela mal y utilizando un extractor, podrás deshacerte de ellos mucho más rápido, siempre y cuando posea un sensor de olor.
Consumen muy poca electricidad: Esta sí que es una gran noticia, ya que el consumo eléctrico promedio de un extractor de baño tradicional es tan bajo que casi no notarás el uso en la cuenta de luz (uno 14 watts por hora). También hay modelos más amigables con el medio ambiente que consumen incluso mucho menos electricidad (menos de 5w por hora).
Evitan que reingrese el aire o humedad a la vivienda: Siempre y cuando posean el sistema antirretorno, todo lo que se expulsa a través del extractor, no vuelve a entrar a tu hogar.
Bonus:
Sensor de Humedad: Es un beneficio extra que poseen algunos extractores el cuál, se activa al detectar un determinado porcentaje de humedad en el ambiente. En Chile, la Norma 3308 y 3309 indican que es obligación en las zonas donde exista Plan de Descontaminación Atmosférico o PDA (considerando solo temas domiciliarios desde la Región de O’Higgins hasta la de Aysén), que los extractores de baño posean higrostato (sensor de humedad), mientras que en los lugares donde no existe PDA, también es buena iniciativa incluirlos, garantizando así un aire limpio al interior del recinto.
Extractores con conexión Wifi: ¿Gran noticia no? La tecnología ha avanzado tanto que hoy es posible controlar un extractor desde tu propio dispositivo móvil gracias a la conexión Wifi o Bluetooth como el modelo Intellivent Ice y el Pax Norte, de Jonas Ventilación que se pueden usar directamente desde una aplicación disponible en Play Store y Apple Store.