Un jefe sexista, la compañera buena gente, pero chismosa; un colega que saca la vuelta y el oficinista de mal carácter, muchos de los tipos humanos que habitan las oficinas alrededor del mundo y que ya han inspirado famosos espacios de la pantalla chica. Sin embargo, “Aggretsuko” se atrevió a tomarlos y darles una nueva forma y color, literalmente, transformándolos en diferentes animales que viven en una gran urbe de Japón. Entre ellos se cuenta Retsuko, la panda roja protagonista del anime inspirado en personajes de Sanrio, la misma compañía tras Hello Kitty.
A ella los seguidores del espacio creado por Rarecho la conocieron en su primera emisión como una inocente chica, que había completado sus estudios superiores y se preparaba para comenzar su vida laboral en Carrier Man Trading Co., Ltd., específicamente en el departamento de contabilidad de esta empresa de comercio. Sin embargo, desde un inicio ella debió soportar a su jefe, el Director Ton, un cerdo amante del té y del golf, con bastante misoginia y poco tacto. Y aunque en apariencia la nueva empleada soportaba todo con humildad y sin levantar la voz, por dentro hervía de rabia.
Una ira que la consumía en muchos momentos a lo largo de la jornada laboral, que solo lograba descargar a través de su inusual pasatiempo: cantar death metal en un bar de karaoke. Algo con que cerraba casi todas las jornadas de duro trabajo frente a una pantalla llena de números, mientras a su alrededor se movía una variopinta fauna de colegas, entre los que se contaba su amiga Fenneko, una zorra fénec que siempre estaba dispuesta a darle un consejo. Además de la alegre, pero un tanto habladora hipopótama Kabae, y el callado Haida, hiena, amante del punk, que desde el primer día se sintió atraído por Retsuko.
Las complicaciones laborales y personales que afectan a Retsuko
Así, a lo largo de las temporadas de la serie animada, en la oficina Retsuko logró acostumbrarse al trato del Director Ton, al mismo tiempo que enfrentó al irritable tejón Anai, un desagradable compañero que llegó como aprendiz de contabilidad, y entabló amistad con dos colegas de cargos superiores: la gorila Gori y la ave secretario Washimi.
Pero fuera del trabajo también tenía diversas experiencias, entre las que se contaron su paso por un banda femenina llamada OTMGirls, a la que se unió para pagar una deuda tras chocar un automóvil y su romance con el burro Tadano, un experto en tecnología que se había hecho millonario con su empresa.
Los diversos ingredientes de los primeros ciclos a los que hace poco se sumó una cuarta entrega que, como acostumbra el espacio, enfrenta a la panda roja y quienes la rodean a situaciones completamente renovadas. Desde su capítulo inicial, cuando ella acaba de mudarse de departamento con la ayuda de Fenneko y Haida, luego de que uno de los seguidores de OTMGirls comenzara a acosarla y hallara la dirección de su anterior vivienda. A lo que se añade el que en sus visitas al bar de karaoke las canciones pop hayan reemplazado a las de metal, ya que ahora libera su rabia y tensión en las artes marciales.
Cambios a los que se suma el hecho de que Retsuko haya empezado a contemplar que una relación romántica con Haida no suena tan descabellada, en especial cuando en el último tiempo él le haya demostrado toda su preocupación y sus amigas Gori, Washimi y Fenneko no dejen de insistir en que son la pareja perfecta. Lo que la pequeña protagonista no espera es que Haida no reacciona de la manera esperada cuando trata de acercarse a él para conocerlo más, alejándose de ella en vez de acercarse.
Una cuarta temporada marcada por los problemas financieros y más sentimiento
El cambio mayor comienza a desarrollarse en la oficina, luego de que el presidente de la empresa, el elefante Shachou, tiene un accidente que lo hace alejarse de su cargo, dejando en su puesto al joven director no ejecutivo Himuro, un perro de la raza saluki que tiene que resolver un gran problema: las graves dificultades financieras que viene acarreando Carrier Man Trading Co., Ltd. en los últimos años. Sin embargo, eso es el inicio de algo que va a afectar directamente a Retsuko y sus colegas: la oficina de contabilidad es la que presenta mayores pérdidas para la compañía, por lo que debe reducir costos.
Himuro le plantea al Director Ton que haga una lista con las fortalezas y debilidades de sus subalternos, para luego ofrecerles a los menos competentes un retiro anticipado, siendo la primera en la lista Kabae por ser mamá y tener hijos que demandan el que a veces no cumpla con sus horas de trabajo. Una situación que se despliega en un universo de animales parlantes, pero que refleja una realidad que se vive a cada minuto en el mundo real, en uno de los ejemplos de cómo “Aggretsuko” plasma la realidad a través de la animación y el humor, haciendo que el espectador se sienta muy identificado.
Sin olvidar tampoco el complemento sentimental que siempre ha estado presente y aumenta en este ciclo del animé, dándole una mayor importancia al personaje de Haida y su nexo con la protagonista. Todo lo que lleva a que esta cuarta temporada solamente corrobore la posición de la serie japonesa de Netflix como uno de sus mejores títulos de animación para adultos de la actualidad.
Título Original: Aguresshibu Retsuko
Director: Rarecho
País: Japón
Año: 2018-2021
Género: Animación, Comedia, Drama
Duración: 15-23 minutos
Voces originales: Kaolip, Souta Arai, Rina Inoue, Shingo Kato, Maki Tsuruta, Komegumi Koiwasaki, Rina Inoue, Maki Tsuruta, Yuki Takahashi
Guión: Rarecho
Música: Satoshi Hono, Hanae Nakamura, Miki Sakurai, Natsumi Tabuchi, Tatsuhiko Saiki
Producción: Yasue Mochizuki
Web: Ver Acá
Fecha de estreno: 16 de diciembre de 2021
Plataforma: Netflix