Con el estreno el pasado 2 de febrero de “El Estafador de Tinder”, no solo los suscriptores de Netflix quedaron sorprendidos con la historia real que conocieron a lo largo de sus casi dos horas de duración, sino que además las redes sociales se llenaron de comentarios sobre este documental británico, original de la plataforma, que reveló la historia de Simon Leviev, un hombre que aparentaba ser un millonario en la aplicación de citas.
Sin embargo, cómo lo muestra la realización, su nombre real es Shimon Hayut, no es heredero de un imperio de diamantes y su ocupación era engañar a mujeres solteras de Europa -y otros lugares del mundo-, robando millones al usar sus tarjetas de crédito y cuentas bancarias para “salvar su vida”. Aunque lo que hacía mientras se ocultaba de sus enemigos era embaucar a otras víctimas con viajes en aviones privados y exclusivas cenas.
El mundo de los “maestros de la farsa” no solo inspira producciones documentales, sino que también puede mezclarse con la ficción y dar vida a series como “Inventando a Anna”, uno de los últimos fenómenos del servicio de streaming, que lleva a la pantalla la historia de una supuesta heredera alemana. Este es el más reciente documental sobre fraude con la firma de Netflix, que vino a sumarse a títulos como “FYRE: La Fiesta más Exclusiva que Nunca Sucedió”, “Ícaro” y “Made You Look: Una Historia Real sobre Arte Falsificado
La investigación periodística sobre la falsa heredera alemana
Un espacio que además cuenta con la firma de Shondaland, la productora de Shonda Rhimes (“Grey’s Anatomy”) que ya había realizado para Netflix la exitosa “Bridgerton” y que acá cambia el romance y sensualidad de época por un relato ambientado en la ciudad de Nueva York de algunos años. Uno de sus principales puntos de referencia de esta entrega es que es la primera creación de la mismísima Rhimes, después de varios años solo enfocada en supervisar el trabajo de sus subalternos.
Y es bajo su misma pluma que nacen los nueve episodios que componen la miniserie que tiene como punto de referencia de su relato “How Anna Delvey Tricked New York’s Party People”, el reportaje publicado en 2018 por la periodista de The New York Magazine, Jessica Pressler. El mismo que ofrecía una cronología del actuar de Anna Delvey, cuyo apellido real es Sorokin, quien aparentando ser una heredera alemana estafó a muchos neoyorquinos, y bancos, hoteles y entidades financieras de la Gran Manzana, por varios miles de dólares.
Así, el primer episodio, que se inicia con la frase “toda esta historia es totalmente cierta, excepto por todas las partes que fueron inventadas”, lleva al público a noviembre de 2017, cuando la periodista Vivian Kent (Anna Chlumsky), quien trabaja en la revista Manhattan, repara en una noticia de The New York Post titulada “Aspirante a Miembro de la Alta Sociedad Arrestada”, que da a conocer el caso de una joven europea que es acusada de robo. Para Kent, con una mayor profundización de los hechos, la noticia le ayudaría a hacer un buen reportaje que la alejará de la nota que le encargaron sus jefes sobre el #MeToo en Wall Street y borrar para siempre un oscuro paso profesional que dio hace algunos años.
Sin embargo, su editor no encuentra interesante la historia de la chica alemana y le pide seguir con lo pactado, lo que en un primer momento desencanta a la periodista, pero rápidamente le da nuevos bríos para, a escondidas, seguir indagando sobre Delvey (Julia Garner).
Los diferentes personajes y aristas que van dibujando el relato
Esto se convierte en el punto de partida de un relato que se divide entre la búsqueda de datos para su reportaje de Kent, que incluye visitar a la chica en la cárcel y tratar de que su abogado le dé más pistas sobre quienes la acusan; y los flashbacks que muestran el accionar de Anna y cómo se hizo de un nombre entre los ricos y poderosos de Nueva York. Entre ellos se cuentan, como descubre la reportera por medio de Instagram, una reconocida benefactora de la sociedad neoyorquina llamada Nora (Kate Burton).
También forman parte de la vida de la acusada algunos nombres de personas “más normales” como Neff (Alexis Floyd), la empleada del hotel en SoHo en que Delvey se hospedó por varios meses, sin pagar la cuenta finalmente, y con quien forjó una fuerte amistad. Una de las únicas personas que creen en la inocencia de la protagonista, quien a lo largo del relato se presenta como una emprendedora que solo quiere dar marcha a su fundación, donde mezclará el arte con un club social.
Así, entre pasado y presente, personajes reales y otros no tanto, “Inventando a Anna” lleva al espectador por un entretenido recorrido por la increíble historia de falsedad y lujos de la supuesta heredera europea que logró conquistar con su inteligencia y frialdad a figuras del arte, la alta sociedad y las finanzas de Nueva York. La mujer fue condenada a la cárcel, liberada y hoy todavía espera en un centro de detención el ser deportada a Alemania; mientras el espacio de Shondaland se mantiene como uno de los más vistos en la plataforma de Netflix, gracias a su detallada ambientación y buenos secundarios.
Título Original: Inventing Anna
Director: David Frankel, Ellen Kuras, Nzingha Stewart, Tom Verica, Daisy von Scherler Mayer
País: Estados Unidos
Año: 2022
Género: Drama, Suspenso
Duración: 59-82 minutos
Con: Anna Chlumsky, Julia Garner, Arian Moayed, Katie Lowes, Alexis Floyd, Anders Holm, Anna Deavere Smith, Jeff Perry, Terry Kinney, Laverne Cox
Guión: Shonda Rhimes, Carolyn Ingber, Nicholas Nardini
Música: Kris Bowers, Pierre Charles
Producción: Jess Brownell, Holden Chang, Jessica Pressler
Web: Ver Acá
Fecha de estreno: 11 de febrero de 2022
Plataforma: Netflix