Hace algunos años la gran disyuntiva era optar o no por la nube, entregando gran parte de los datos a un tercero. Con ese debate prácticamente cerrado, los servicios críticos se enfrentan a otra encrucijada para garantizar una operatividad 24/7: el tipo de conexión a internet.
Y es que contingencias de distinto tipo, como robo de cables, terremotos o incendios han hecho que contar con una solución de respaldo sea la única opción para continuar operando, sin importar el nivel de la emergencia. Un ejemplo de lo anterior se dio el año pasado en el Aeropuerto de Santiago, cuando una caída de internet obligó a realizar todos los trámites de forma manual, generando aglomeraciones en los embarques.
En ese contexto, una solución que ha ganado mucho terreno es el Internet Dedicado Inalámbrico, que llega a confirmar que la transmisión de datos vía Wireless puede ser incluso tan rápida como el cable, evitando la desconexión por eventualidades de distinto tipo.
Víctor Opazo Carvallo, Gerente General de Netline, explicó que “el mercado de la alta disponibilidad es muy exigente. Pero hoy es posible responder a esas necesidades gracias a la tecnología inalámbrica, 100% dedicada y con bandas simétricas, que permiten estar a la par de las velocidades por cable, pero con un alcance imposible de igualar”.
En efecto, el Internet Dedicado Inalámbrico permite lograr a plenitud la continuidad operacional incluso en prácticamente cualquier punto del país. En el caso de Netline, la compañía cuenta con NetAir, una solución vía microondas y que garantiza total ancho de banda, con conexión simétrica y exclusiva, disponible en las Regiones Metropolitana, de O´Higgins y del Maule, independiente de que la ubicación en esas zonas no sea en las grandes ciudades, alcanzando los puntos más recónditos.
Y para todo el resto del país, el servicio NetSat opera mediante un enlace en la banda Ka, sin interferencias con microondas y con una longitud de banda a prueba de cualquier obstáculo, perfecta para lograr conectividad total incluso en los lugares más alejados del país.
“La continuidad operacional es un valor cada vez más demandado, pero que no todos pueden garantizar. Incluso hay certificaciones, como la norma ISO 22301. Para obtenerla, es necesario contar con sistemas alternativos para la conexión a Internet y para el suministro eléctrico, entre otros requisitos”, agregó el ejecutivo de Netline.
Para servicios esenciales o cualquier negocio en que la continuidad operativa sea un requisito base, existen soluciones a la medida y hechas en Chile, que permiten lograr ese atributo diferenciador cada vez más valorado, en un mundo en que las contingencias y emergencias ocurren todos los días.