Nov 19, 2025

Review de Amor de mentira

Una comedia romántica que se siente como un abrazo cálido, con dos protagonistas que brillan con una química irresistible. «Amor de mentira» no solo juega con el cliché del matrimonio contractual, sino que lo transforma en una historia moderna, dulce y llena de corazón. Y sí: me encantó, es totalmente mi estilo de serie, quizá porque ya adoraba a Jung So-min desde “Alquimia de Almas” y a Choi Woo-shik desde “Parásito”.

Una casa ganada por accidente, un ex infiel que vuelve para complicarlo todo, dos Kim Woo-joo que no podrían ser más distintos y un matrimonio ficticio de 90 días que —seamos honestas— no tarda mucho en sentirse demasiado real.  Amor de mentira llegó a Disney+ Latinoamérica y ya están sus 12 capítulos completos para recordarnos por qué amamos los k-dramas románticos: química explosiva, enredos deliciosos y esa mezcla perfecta de humor y corazón que nos deja con la sonrisa puesta. Y sí, debo admitirlo: me encantó. Es totalmente mi tipo de serie, especialmente con un elenco que adoro desde hace años.

No hay nada que disfrute más que un buen k-drama que toma un cliché conocido y lo exprime con cariño, ingenio y personajes entrañables. Y Amor de mentira (Would You Marry Me) hace exactamente eso: agarra el famoso trope del “matrimonio contractual” y le da una vuelta simpática, fresca y emocional. Apenas arranca, ya sabes que estás ante una historia que te va a hacer reír, suspirar y probablemente decir en voz alta más de una vez: “¡Estos dos se enamoran sí o sí!”.

La premisa es simple, pero irresistible

Yoo Me Ri, interpretada por la maravillosa Jung So-min (yo la amé en Alquimia de Almas y Amor en la puerta de al lado), descubre la infidelidad de su exnovio y, como si fuera poco, cae en una estafa inmobiliaria. Sin embargo, la vida —y la suerte dramática de los k-dramas— le lanza una oportunidad inesperada: gana una casa para recién casados. Una casa preciosa, soñada… y completamente inaccesible sin un esposo.

Y aquí es donde entra él, el otro Kim Woo-joo. Ese “otro” es ni más ni menos que Choi Woo-shik, uno de mis actores coreanos favoritos desde Parasite, donde me conquistó con su mezcla de vulnerabilidad y carisma; y en Our Beloved Summer (Aquel año Nuestro) mostró que la comedia romántica también le queda pintada. Esta vez interpreta a un heredero gruñón, perfeccionista y algo narcisista, a cargo del marketing de la panadería familiar Myeongsoondang, una institución con 80 años de historia.

La coincidencia de nombres entre el ex infiel y el heredero serio es el puntapié perfecto para un enredo delicioso: para reclamar la casa de recién casados, Yoo Me Ri le propone al nuevo Kim Woo-joo un matrimonio temporario de 90 días. Y él, que parece frío como témpano, acepta contra todo pronóstico. Lo que sigue es convivencia forzada, hábitos chocando, tradiciones familiares que complican el plan y dos personalidades que, a punta de pequeños gestos y momentos cotidianos, empiezan a desdibujar los límites del contrato.

Tengo que decirlo:

La química entre Choi Woo-shik y Jung So-min es la gran joya de esta serie. Es el tipo de pareja que podría estar leyendo manuales de instrucciones en silencio y aun así transmitir tensión romántica. Él es el clásico “tsundere” que se derrite lento y en silencio; ella, una protagonista luminosa, creativa y tremendamente humana. Me encanta cuando las heroínas de los k-dramas tienen chispa y oficio, y Me Ri tiene ambas cosas: es diseñadora, emprendedora, resiliente, graciosa y completamente capaz de ponerse un disfraz ridículo con tal de sacar adelante su negocio. Es imposible no adorarla.

Y, por supuesto, la trama se condimentará aún más con la aparición del exnovio, interpretado por Seo Bum-june, otro Kim Woo-joo pero más joven, impulsivo e inmaduro. Su regreso no solo agita el triángulo, sino que reabre heridas, dudas y decisiones sentimentales postergadas. ¿Qué hubiera pasado si su historia no terminaba así? ¿Qué tan fuerte es lo que empieza a crecer entre los “casados por contrato”? Esos dilemas están muy bien ejecutados y le dan a la serie un punto emocional que excede la comedia romántica tradicional.

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Elenco secundario

Lo que también me encantó es que Amor de mentira da espacio para respirar más allá de su pareja principal. El elenco secundario —Bae Na-ra, Shin Seul-gi, Jung Ae-ri, Baek Ji-won y Kim Young-min— aporta carácter, drama y hasta intriga, el tipo de momentos entrañables que hacen que un k-drama valga la pena. Desde amistades que se convierten en familia hasta malentendidos laborales que rozan lo absurdo, y herencias familiares que tienen un pasado oscuro, todo está muy bien equilibrado.

La serie completa cuenta con 12 episodios que ya están disponibles en Disney+ Latinoamérica, en su idioma original y con subtítulos en español. Quienes siguieron su emisión semanal saben que su transmisión culminó el 15 de noviembre (llevamos una nota completa en la edición de noviembre), pero si recién te estás subiendo a la ola romántica, tienes la suerte de poder maratonearla sin interrupciones.

Personalmente, es el tipo de serie que me deja feliz. Me gusta su energía, su humor, su ternura. Me gustan los actores —ambos favoritos míos desde hace años— y me gusta la forma en que la historia usa un cliché clásico para entregar algo que se siente auténtico y cálido.

¿Mi recomendación?

Entra a esta casa ficticia y déjate llevar por estos 90 días de amor accidental. Es probable que, igual que yo, termines deseando un par de capítulos extra solo para quedarte un ratito más con estos personajes que se sienten tan cercanos.

  • Título Original: U Ju Me-li Mi
  • Director: In Hyuk Hwang, Hyun Wook Song
  • País: Corea del Sur
  • Año: 2025
  • Género: Drama, Comedia, Romance, Coreano
  • Duración: 1 hora 10 minutos aprox por capítulo
  • Con: Jung So-min, Choi Woo-sik, Bae Na-Ra, Seo Bum-june, Shin Seul-ki, Park Yeon-woo, Kim Young-min, Baek Ji-won, Ko Gun-Han
  • Guión: Ha-na Lee
  • Fecha de estreno: 10 de octubre
  • Ver Acá
  • Plataforma: Disney+

Samantha Sparrow

Amo el cine y las series. Soy la fundadora de un medio de comunicación para poder dedicarme a mi pasión sin que nadie me diga qué puedo o no escribir. Y finalmente conseguir mi objetivo entrevistar a Peter Jackson y James Cameron.

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