Con su nombre tan corto como memorable, “Flow” se convirtió en una de las grandes sorpresas de la temporada de galardones fílmicos. Esto gracias a sus numerosas nominaciones y premios, entre ellos el Globo de Oro, a la par de títulos respaldados por grandes y tradicionales estudios de animación.
Todo un logro para este largometraje independiente, coproducido entre Latvia, Francia y Bélgica, que fue realizado utilizando un software gratuito. Lo que solo confirma que para hacer una gran película no es necesario un abultado presupuesto, sino que esencialmente creatividad y ganas de experimentar.
Dos de las herramientas claves para que Gints Zilbalodis, director y uno de los guionistas -junto a Matīss Kaža-, diera vida a una de las mejores cintas animadas de los últimos años. En la que además se dejaron de lado los diálogos y a los humanos, para enfocarse en un grupo de animales y su singular aventura.
El inicio del particular relato de Flow
En un ágil relato que se inicia cuando un gato gris recorre el bosque y llama su atención la aparición de algunos perros, los que llegan a un riachuelo para pescar su cena. Sin embargo, uno de los pescados se les escapa y el felino se apodera de él, haciendo que el grupo de visitantes lo persiga.
Pero pronto algo llama la atención de los canes y el gato puede continuar con su excursión en soledad. Aunque solo por unos minutos, ya que tras una estampida de ciervos el lugar es sumergido por una inundación -el flujo del título-, de la que el gato escapa junto a uno de los perros que antes lo seguían.
El que es de la raza labrador y lo acompaña hasta la casa abandonada en que vive, la cual con seguridad pertenecía a un amante de los gatos, por las estatuas y figuras felinas que se encuentran fuera y dentro de ella. Pero el refugio se vuelve temporal, ya que el nivel del agua continúa subiendo muy rápidamente.
La aventura de una singular tripulación
Esto lleva a que el perro se una a sus amigos arriba de un bote y el felino protagonista comience a buscar el terreno más alto, hasta que queda aislado en la gran estatua de un gato (!!). Una situación de la que escapa justo a tiempo, cuando está a punto de ser sumergido y logra subir a un velero que pasa por ahí.
En el cual hay un pasajero: un serio capibara que prefiere dormir. Pero el dúo de improvisados e inexpertos navegantes no continúa solo por mucho tiempo, ya que se posa en la embarcación un ave secretario blanca. La que primero asusta al gato y luego se convierte en su aliada.
Al mismo tiempo que la tripulación aumenta. Primero con un lémur que el capibara recoge en los restos de una edificación en ruinas y, más tarde, sumando al mismo labrador que ya había acompañado al gato. Los que a pesar de su naturaleza animal, revelan una sorprendente habilidad para manejar el velero.
Además de mostrar rasgos de solidaridad y preocupación por los otros, en medio de un entorno adverso, rodeado de los rastros de ciudades que alguna vez habitó el hombre. En el capítulo final de «Flow», una aventura animada, onírica y cautivante, imperdible para los amantes de los animales y las buenas historias.
- Título Original: Straume
- Director: Gints Zilbalodis
- País: Latvia, Francia, Bélgica
- Año: 2024
- Género: Animación, Aventura, Fantasía
- Duración: 1 hora 25 minutos
- Guión: Gints Zilbalodis, Matīss Kaža
- Música: Gints Zilbalodis, Rihards Zaļupe
- Producción: Matīss Kaža, Gints Zilbalodis, Ron Dyens, Gregory Zalcman
- Fecha de estreno: 20 de febrero de 2025
- Distribuidora: BF Distribution