Lamentablemente es poco o casi nada lo que se estrena por estos lados del cine suizo, por lo que siempre será interesante conocer más de la producción audiovisual de ese país y al menos las plataformas pueden ayudar a acercar algunos de esos títulos, como por ejemplo MUBI, que recientemente estrenó en su catálogo “Unrest”, el título internacional para Unrueh, escrita y dirigida por el suizo Cyril Schäublin. Un filme que desde su premiere mundial el año pasado en el Festival de Berlín como parte de la sección Encuentros, donde recibió el premio a la Mejor Dirección, ha tenido una sólida recepción de los críticos, elogiado en medios como The Hollywood Reporter y el New York Times e incluido en varias listas de lo mejor del 2022.
Ya en 2017 Schäublin, hoy de 38 años, había dejado una buena impresión con su primer largometraje, “Dene wos guet geit”, que también había tenido un importante reconocimiento en su debut mundial, al recibir una mención especial como mejor debut en la sección Cineastas del Presente en el Festival de Locarno y al año siguiente, ser nominado como descubrimiento del año en los Premios del Cine Europeo. Ambientada hace 150 años en una pequeña ciudad en un valle del noroeste suizo, esta nueva película se centra en esa comunidad que gira en torno a la elaboración de relojes en la fábrica local, donde todo parece haberse mantenido igual durante décadas de tradición, pero la modernidad y los cambios sociales y políticos están empezando a sembrar la semilla de tiempos muy distintos.
El factor humano en tiempos de cambio
Aunque son varios los personajes que van apareciendo y reapareciendo a lo largo del metraje, hay dos que parecen tener más protagonismo: Josephine, la joven trabajadora de la fábrica que tiene la misión de elaborar una pieza muy determinante en cada reloj, la rueda del balance del mecanismo, llamada «unrueh», lo que explica uno de los significados del título original de la película; y Pyotr, geógrafo y cartógrafo ruso que está de visita en la zona para diseñar un nuevo mapa. Ambos se irán conociendo e involucrando de a poco con el creciente movimiento anarquista local, que surge precisamente en esos años en los que se desarrollaban nuevas maneras de organizar el tiempo, la economía y las condiciones laborales. El personaje de él está inspirado en Pyotr Kropotkin, fallecido hace un siglo y quien efectivamente estuvo un tiempo en una ciudad de un valle suizo en una etapa decisiva, lo que describe en su libro de memorias que sirvió como fuente a este largometraje, junto con las experiencias y recuerdos de la abuela y tías abuelas del cineasta, quienes justamente trabajaron en una fábrica de relojes.
Desde el inicio con la conversación entre un grupo de damas rusas hasta su sutil y muy especial desenlace, “Unrest” va desplegando una serie de personajes cuya cotidianeidad se va modificando de manera asordinada pero marcada, a través de una muy lograda ambientación de época y una historia que nos permite reflexionar en cómo lo surgido en el pasado sigue influyendo o determinando nuestras vidas actuales y la manera en que nos organizamos y estructuramos como sociedad. Por sus alcances sociales y políticos, al describirlo puede sonar árido o demasiado intelectual, pero la película nunca pierde de vista el factor humano, tanto en los diálogos de los personajes -en distintos idiomas- como en el hecho de que sean interpretados por actores no profesionales, quienes en la vida real habitan en la zona del valle de Saint-Imier donde está filmada.
El sello visual del director
Estos personajes impasibles o que no expresan demasiado a nivel externo lo que pueden estar sintiendo o pensando, nos recuerdan en más de un momento a los que suelen aparecer en películas de directores como Kaurismäki, Jarmusch o incluso Wes Anderson, lo que también puede aparecer en situaciones que deberían ser más dramáticas, pero a la vez reflejan elementos de humor o que rozan la comicidad. Pero tampoco se trata totalmente de una sátira, ni es una parodia, ni Schäublin se dedica a imitar los estilos de otros colegas, porque de todos modos tiene un sello personal y propio, partiendo por sus decisiones formales en el punto de vista y los particulares encuadres con que está filmada, desde la extrema cercanía con los mecanismos de los relojes hasta la distancia o proximidad con que se registran algunas conversaciones, o la manera en que aparece la naturaleza, que al tratarse de un valle en Suiza podría estar reflejada en toda su belleza paisajística, pero en cambio aquí siempre está enmarcada en ángulos atípicos y que no muestran demasiado.
Al estar ambientada en el contexto de una fábrica de relojes, en “Unrest” el manejo del tiempo es parte de la propuesta, lo que se ve traducido en un ritmo sostenido y constante, aunque de todos modos no es de extrañar si no todos los espectadores consiguen conectar o entusiasmarse con el planteamiento visual y argumental, tan sistemático, frío y minucioso como los propios procesos y reglamentos de la fábrica, de un tono medido y contenido que no es para todos los gustos, pero que al mismo tiempo profundiza mucho más de lo que parece en los alcances públicos y privados de un momento histórico decisivo e influyente.
- Título original: Unrueh
- Director: Cyril Schäublin
- País: Suiza
- Año: 2022
- Género: Drama, historia
- Duración: 93 minutos
- Guión: Cyril Schäublin
- Con: Clara Gostynski, Valentin Mertz, Alexei Evstratov, Monika Stalder, Li Tavor, Mayo Irion, Nikolai Bosshardt, Hélio Thiémard
- Música: Li Tavor
- Producción: Michela Pini, Linda Vogel
- Fecha de estreno: 22 de febrero, 2023
- Web: Ver Acá
- Plataforma: MUBI
